El PSOE ha preguntado en el Pleno de las Cortes de Castilla y León por la paupérrima ejecución en los presupuestos de 2013 y 2014 en el Hospital de Soria, que es de poco más del 15 % en 2013 y 0 en 2014.

El Partido Popular ha vuelto a reiterar el mensaje de que la Sanidad en Soria es la mejor de toda la Comunidad y en esta ocasión a través del Consejero de Sanidad de la Junta de Castilla y León en contestación a la pregunta del Procurador  Fco. Javier Muñoz Expósito en el Pleno de las Cortes celebrado en la tarde de hoy.

Porque la realidad dista mucho del mensaje que repite y reitera el Partido Popular cada vez que habla del Hospital de Soria. La realidad es que 1300 días después de que se anunciaran por primera vez en el BOCYL la licitación de las obras en el Hospital de Soria, la realidad es que siguen sin ejecutarse un solo euro. Lo que si ha ocurrido es una renuncia a las obras, muchas mentiras y la cantidad de 0 euros gastados.

Y todo esto después de que el Director General de Administración e Infraestructuras nos informaba que el Hospital de Soria debía algo más de 37 millones de euros de facturas pendientes de hasta tres años atrás. De esos más de 37 millones de deuda del Hospital la Junta financió casi 28 millones con el Plan Montoro. Gracias a esa nefasta gestión esos 28 millones se van a convertir en los próximos años en 40 millones, es decir 12 más solo para el pago de intereses.

De tal manera que solo este año la Junta de Castilla y León tendrá que abonar 1,8 millones de euros para el pago de los intereses de la deuda, más la parte correspondiente  a lo que  se debía,  con lo  que aquí tenemos una explicación del porqué el PP lleva retrasando la inversión  en materia sanitaria en la provincia de Soria.

Porque el problema es que ya no solo no se haya ejecutado ni un solo euro del presupuesto destinado a las obras del Hospital del 2013 sino que a día de hoy no está definido ni licitado ni mucho menos ejecutado ni uno solo euro de lo presupuestado para 2014.

Y mientras al Partido Popular no le tiembla la mano a la hora de reducir personal, establecer copagos y reducir prestaciones.