La procuradora socialista, Esther Pérez pregunta a la Consejera de Agricultura y Ganadería, en qué situación quedan los ganaderos mientras esperan a la convocatoria de ayudas que ha anunciado y se construyen estas balsas, que además tampoco serán una solución definitiva y que demuestran la escasa apuesta del PP por el futuro rural y por un tipo de alternativas que sí están en el libro de ruta de Europa y que ya en Soria generan 60 empleos directos, ahora en el aire.

Una vez más el Partido Popular demuestra que poco o nada le importa la problemática de las plantas de cogeneración a través de purines, ni tampoco el empleo que las mismas han generado en el medio rural en la provincia de Soria, más de 60 trabajadores de forma directa, toda vez que sigue planteando “parches” que no solucionan el problema ni de forma inmediata ni mucho menos a futuro. Esta dejadez contrasta con las peticiones de los afectados que han sido muy tajantes y claros en sus reivindicaciones insistiendo que la parada actual de las plantas supondrá su cierre definitivo si no se dan soluciones meditadas y reales.

Por ello, las balsas anunciadas no son la solución, afirma la procuradora soriana Esther Pérez que recuerda la negativa a dar una moratoria a las ayudas de las plantas por parte del PP lo que habría ampliado el margen de maniobra. Estas balsas, para las cuales se anuncian ayudas, precisan por lo tanto de una convocatoria oficial primero y una ejecución después y ahora los afectados carecen de ese tiempo con las plantas paradas. Además, los ganaderos tendrían que asumir unos costes de traslados más alto al no poder tratar estos purines y realizar un transporte sin licuar, secar con el incremento del precio y del traslado todo lo cual hace poco viable esta medida para las explotaciones. La socialista recuerda igualmente la pérdida de empleo directo e indirecto que conlleva la parada y cierre de las plantas de purines en el medio rural y añade “el contrasentido de ir a la inversa de otros países y de la hoja de ruta de Europa que sí apuesta por este tipo de plantas y por el tratamiento”.

Esther Pérez ha hecho estas declaraciones después del anuncio de la Consejera a la provincia de Soria, y un mes después de el Partido Popular en la Comisión de Agricultura y ganadería rechazara la propuesta de los socialistas de instar al Gobierno de España el mantenimiento de las ayudas y rechazara la posibilidad de pedir una moratoria hasta finales de 2015, que permita la búsqueda de de soluciones, tiempo necesario también en el caso de la solución ahora planteada puesto la convocatoria y la construcción requieren de un tiempo que se está negando.

Los socialistas recuerdan que en el informe del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente de 21 de marzo de 2014, al que el grupo parlamentario ha tenido acceso, se alude a las Comunidades afectadas y con explotaciones en zonas vulnerables que son Castilla y León, Castilla La Mancha, Cataluña y Murcia, con las propuestas de Cataluña, Galicia y Murcia, con la alternativa de plantas de biogás que utilizan deyecciones ganaderas, o alternativa de compostaje de la fracción sólida del purín/digestato, propuesto por Cataluña,la valorización como fertilizante, propuesto por Castilla La Mancha y Galicia y otras alternativas como la creación de un banco o bolsa de purines a nivel regional propuesto por Murcia y la elaboración de suelos artificiales propuesto por Galicia, y sin embargo nada propone la Junta de Castilla y León.

El mismo informe recoge las explotaciones en zonas vulnerables de Castilla y León que entregan purines a las plantas de tratamiento y Soria no aparece en el mapa que las describe, ni como zona vulnerable, ni con explotaciones agrarias, ni con plantas de cogeneración, demostrando así la falta de interés y preocupación del Partido Popular por la provincia soriana.

El Partido Popular ignora de esta manera, los contratos de los ganaderos con las plantas y de las plantas con el Gobierno, “gobierno del Partido Popular, que pretende cambiar las reglas a mitad de la partida, poniendo en riesgo el mantenimiento de todo un sector y la expansión del mismo”.

Desde el PSOE han recordado que cada planta difiere en cuanto a proceso y tecnología, pero que todas tenían asegurada una retribución específica durante un periodo de 15 años, y que a fecha de hoy y tras el anuncio del gobierno las plantas están paradas.

Han destacado igualmente los beneficios directos e indirectos de las plantas de cogeneración que durante los años de funcionamientos han permitido además al sector porcino dimensionarse y ganar competitividad, siendo en la actualidad un referente a nivel europeo y mundial.

El PSOE recuerda que han supuesto un revulsivo para la actividad económica y la fijación de población al territorio contribuyendo a la creación de puestos de trabajo altamente cualificados, y que el cierre de las plantas a corto plazo puede generar graves consecuencias medioambientales, una vez agotada la capacidad de almacenamiento de las balsas actuales y hasta la construcción de las anunciadas en el día de ayer.

Como se recordará, de las 29 plantas en España, 11 están en Castilla y León y 4 en Soria, en Los Rábanos, Langa de Duero, Almazán y Agreda. Sólo en Soria son 60 los empleos directos en riesgo además de un número importante de puestos de trabajo indirectos.