* La reforma del PP es insolidaria con las rentas medias y con los territorios desfavorecidos, como Soria, que precisan de un Estado fuerte para garantizar la redistribución.

* La devaluación salarial del modelo PP en Soria implica que hoy en la provincia se cobran 72 millones de euros menos que en el año 2011

* Según el Fondo Monetario Internacional, España es el país del mundo donde más han crecido las desigualdades y esta reforma fiscal, de no corregirse con la propuesta socialista, acrecentaría estas desigualdades.

* Lavilla invita a los sorianos a calcular en su propia nómina, “Si el PP dice que Soria dejará de pagar 20 millones de euros, les invito a los sorianos a revisar su nómina y calcular, en su caso particular, en qué cantidad exacta le ha beneficiado en su nómina a partir de julio”

* El desequilibrio que advierte la Unión Europea en los PGE 2016 de 10.000 millones de euros, de seguir gobernando el PP, solo se cubrirá con recortes o con la anulación de esta reforma o la eliminación de la mayor parte de las inversiones.

Félix Lavilla, Coordinador de la campaña del PSOE en Soria, que ha sido miembro de la Mesa de Economía en la X Legislatura en el Congreso de los Diputados, afirma:

“Tras las subidas de impuestos que ha aplicado el PP a lo largo de la Legislatura, ahora, cuando vienen las elecciones ha aprobado una reforma fiscal que mermará las arcas del Estado en 9.000 millones de euros, según los propios cálculos del Gobierno del PP, mientras la Unión Europea advierte a España que los Presupuestos Generales del Estado de 2016 tienen un desequilibrio de 10.000 millones de euros, y el próximo Gobierno, gobierne quien gobierne tendrá la obligación de equilibrar las cuentas. Es decir la reforma fiscal que deja de ingresar 9.000 millones de euros, y que ya ha entrado en vigor a partir del mes de julio de 2015, no se basa en un crecimiento económico previo que permita dejar de ingresar dinero al Estado; si no en una reducción de ingresos al calor de la fecha electoral del 20 de diciembre, y con el peligro, advertido, por la UE de desequilibrio financiero”.

“Esto obliga a poner en tela de juicio las pobres inversiones que contemplan los PGE 2016 para Soria, por dos razones, la primera porque hay que juzgar lo invertido en la presente legislatura, y ha concluido, o como mucho el mandato del actual gobierno hasta el 20 de diciembre; y la segunda porque el boquete de 10.000 millones de euros que reclama Europa, habrá de ser, obligatoriamente asumido, y por tanto habrá que modificar los PGE 2016. Si gobernase el PP, sin duda, sería a costa de las inversiones y de más recortes”.

Entiendo que el Secretario de Estado de Hacienda, Miguel Ferrer, se haya hecho fijo a venir Soria, puesto que le tiene que agradecer a la Presidenta del PP de Soria y senadora, María del Mar Angulo, que como portavoz de Hacienda en el Senado, haya sido la persona que ha defendido “los recortes” en el conjunto del país; recortes que han motivado que España hoy haya sido el país que más ha crecido la desigualdad según el Fondo Monetario Internacional (FMI).

En la provincia de Soria, concretamente, aunque se descuente que hay 4.300 trabajadores menos (septiembre de 2016, frente a diciembre de 2011 – lo cual no deja de ser una cruel realidad de cómo las políticas del PP han perjudicado a la provincia-), los salarios totales en la provincia de Soria han bajado 72 millones de euros, frente a los 720 millones de euros del año 2011, la masa salarial (datos de 2014) de la Agencia Tributaria, sitúa el total en 648 millones, lo que implica una caída global, si bien es verdad, que hay 4.300 trabajadores menos. La reforma fiscal del PP, que beneficiará, principalmente, a las rentas más altas, sorianas, aun admitiendo como válida la cifra de 20 millones de menor recaudación en Soria, no compensaría, en absoluto los 72 millones de euros que han sufrido los salarios sorianos, principalmente por los efectos de la reforma laboral y que hoy hay menos personas trabajando en Soria.

Pero sobre la provincia de Soria, de seguir gobernando el PP, se ciernen dos amenazas más, la primera es que el aumento de la desigualdad se cebará sobre provincias como la nuestra que precisan de la solidaridad del conjunto; un Estado más débil tiene menor capacidad de redistribuir. En este sentido es preciso recordar que España ha crecido en desigualdad. El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha publicado su segundo informe al respecto en el plazo de dos semanas y abordado esta vez cómo las brechas sociales se han ensanchado en la mayor parte de países en procesos de consolidación fiscal (los recortes para cuadrar las cuentas públicas), si bien España es la economía de la UE dónde más ha aumentado las diferencias entre ricos y pobres.

El informe no deja indiferente a nadie y demuestra cómo las políticas de desigualdad del PP ensanchan la diferencia entre los que tienen más y los que no llegan a fin de mes. No podemos, ni debemos olvidar, que la Cruz Roja de Soria atiende a unas 1.400 personas se atiende para que puedan comer y que más de 2.000 vecinos de la capital están en riesgo de pobreza severa, según los cálculos de Cruz Roja Soria, agravándose en el caso de mujeres y niños.

No es lo mismo la pobreza que la desigualdad, esta última puede aumentar en momentos tanto de bonanza como de crisis y, de hecho, estas han aumentado desde 1990 en prácticamente todas las economías avanzadas y emergentes de Europa, pese a que las tasas de pobreza se han reducido. Las políticas del PP generan desigualdad, hacia las personas, y en nuestro caso, (como se demuestra al no atender prioridades como la ITI o la despoblación, también territoriales).

Las cuentas públicas del PP en el conjunto de España han agravado la brecha social, al poner más carga relativa en los bolsillos menos pudientes, o bien reducir el impacto y, en algunos casos, incluso darle y lograr estrechar la brecha social.

En el caso de España, aunque la crisis ha causado la mayor brecha en el coeficiente Gini (en el que 0 sería la igualdad total y 1 sería desigualdad absoluta), el diseño de las políticas de ajuste hasta 2012 han resultado progresivas, de modo que ese aumento del índice Gini de inequidad por valores de mercado (previo al efecto de los impuestos y el impacto de los servicios públicos y transferencias sociales) es superior al aumento de la desigualdad de ingresos disponibles (que sí incorpora el impacto de estas medidas fiscales)

En casi dos tercios de las economías analizadas, el aumento de la brecha social desde 2007 fue contenido o incluso revertido por las medidas fiscales. Además, de España, Grecia, Letonia, Portugal y Rumanía aplicaron medidas progresivas entre 2008 y 2012, ya que los hogares en los estratos mejor situados soportaron el grueso del ajuste, pero en otros países, como Italia y Reino Unido, “el ajuste tendió a ser menos redistributivo y más pequeño en volumen”.

La brecha crece más cuando los ajustes se concentran más en los impuestos regresivos y cortando el gasto social progresivo. El estudio recalca que los impuestos directos (como el IRPF o el Impuesto de Sociedades) “son más redistributivos” que los indirectos, como aquellos que gravan el consumo (IVA) y la protección social es también más efectiva a la hora de reducir la desigualdad. En las últimas décadas los tributos directos y las transferencias sociales ha reducido en un tercio la desigualdad, según el FMI. Por ejemplo, en 2005 el coeficiente Gini para los ingresos disponibles era 14 puntos porcentuales más bajo que el mismo coeficiente en términos de mercados (sin el impacto fiscal).

En la siguiente tabla podemos ver que en la información oficial del Ministerio de Hacienda, solo se refiere a “porcentajes”, de lo que se dejará de ingresar por tramos de renta, pero es obvio que no es lo mismo un porcentaje sobre una renta de 20.000 euros que sobre la de 100.000 euros:

FOMENTAN LA DESIGUALDAD, HACEN MÁS RICO AL RICO Y CARGAN MÁS LA RECAUDACIÓN EN LAS CLASES MEDIAS

La reforma del IRPF reduce mucho más los impuestos de las rentas altas que los de las rentas bajas. ASÍ:

–  Una renta de 22.000€ anuales ahorra 400€.

– Una renta de 300.000 € se ahorra 12.300€

– Una renta de más de 1 Millón de euros, ahorra más de 60.000€

España es según el FMI el país del mundo donde más ha aumentado la desigualdad durante la crisis. Ahora se plantean eliminar el impuesto de patrimonio a rentas altas, bajar tipos máximos del IRPF aunque seguirían por encima de los que se encontró Rajoy, subir el IVA reducido, subir el IBI y subir las cotizaciones sociales a los trabajadores. Por lo tanto, estaríamos hablando de la reforma fiscal más regresiva de la historia de nuestra democracia. Una reforma que volvería a beneficiar al 1% más rico de la población y que acabaríamos pagando la clase media y las rentas más bajas.

El PSOE siempre ha mantenido que toda reforma de la fiscalidad debe atender a los principios de suficiencia, equidad, progresividad y justicia. Pero el efecto conjunto de la reforma fiscal tanto del IRPF aprobada por el Gobierno supone un impacto recaudatorio en nuestro país de 9.000 millones, coste que no podemos permitirnos, dado que plantea una reducción de impuestos en un momento en que  la incertidumbre sobre la evolución económica es muy grande, lo que supone retirar ingresos públicos que deberían destinarse a la inversión y la creación de empleo; al final, una merma de ingresos siempre lo pagan los mismos: las personas menos favorecidas y los territorios como Soria que precisan de la solidaridad de los demás.

Los ingresos fiscales deben garantizar la cobertura de los servicios públicos necesarios de calidad, servicios que han sufrido una deterioro sin precedentes derivado de los sucesivos recortes en sanidad, educación o I+D+i. Reducir ingresos fiscales en una situación en que no se cubren los servicios públicos elementales garantiza la insuficiencia y aumenta la injusticia del sistema.

Bajar impuestos no es necesario; equilibrar la carga tributaria sí lo es. Sin embargo, la apuesta es hacia un mayor desequilibrio entre rentas del capital y rentas del trabajo. Además, la reforma se traduce en una rebaja de impuestos directos que beneficia a las grandes empresas y a las rentas de capital, es decir, a las grandes fortunas, haciendo recaer aún más los ingresos tributarios en las rentas productivas y de manera especial en las rentas del trabajo, que en términos generales, son las que soportan el grueso recaudatorio del impuesto sobre la renta. Y mientras, se pospone la lucha contra el fraude, que debe ser la vía fundamental de incremento de la recaudación.

Desde el PSOE no consideramos que sea el momento de renunciar a ingresos fiscales, con el nivel de deuda que tenemos que afrontar y en perjuicio de la prestación de servicios que demanda y necesitan la ciudadanía y los trabajadores de nuestro país.

En definitiva, el conjunto es unas modificaciones impositivas que generan mayor insuficiencia de recursos, que aumentan la desigualdad y disminuyen la progresividad y que suponen una mayor injusticia del sistema, algo de lo que ayer no habló el Secretario de Estado de Hacienda (ejecutor de los recortes, junto a la voz en el Senado de María del Mar Angulo para aprobarlos, como portavoz, y que sigue guardando silencio, tanto ella como el Secretario de Estado, ayer en Soria, sobre uno de los efectos de los recortes y la invasión autonómica  en las oposiciones de Enfermería. 

LA REFORMA FISCAL DEL PSOE PERMITIRÁ INGRESAR 25.000 MILLOENS MÁS EN 2019 Y PERMITIR UN ESTADO MÁS FUERTE PARA ATENDER LA SOLIDARIDAD HACIA LAS PERSONAS Y PROVINCIAS COMO SORIA 

El PSOE presenta una reforma fiscal para ingresar 25.000 millones más en 2019 y dejar el déficit al 1% 

Si El PSOE, gobierna a partir de 2016 hará uso “al máximo” de las posibilidades de flexibilidad que ofrece la Unión Europea para negociar “una senda gradual” para cumplir los objetivos de déficit. Si el resultado de las elecciones generales del próximo 20 de diciembre nos permite llegar a La Moncloa, mantendremos compromiso con la estabilidad presupuestaria, pero la recaudación será más justa y equitativa.

El programa electoral del PSOE para las elecciones generales incluirá una amplia reforma fiscal que contempla la recuperación del impuesto sobre el patrimonio y una subida efectiva de gravámenes a las grandes empresas. Habrá un tipo mínimo impositivo en el de sociedades de un 15% de los beneficios, cuando ahora la media ronda el 5%.

Mejorar la tributación para las pequeñas y medianas empresas (mayoría en Soria)

En el caso del impuesto sobre sociedades, se propondrá una tasa mínima del 15% sobre el beneficio de las empresas. Con ello se intenta evitar la actual situación por la que las grandes corporaciones acaban pagando un tipo efectivo inferior al 5%, mientras que las pequeñas y medianas empresas, e incluso los autónomos, cotizan por encima del 20%. Tras la última reforma del impuesto sobre sociedades, el tipo impositivo quedó fijado en el 28% en 2015, una tasa que caería al 25% en 2016. Sin embargo, las deducciones y los créditos fiscales sitúan el pago real de este impuesto entre un 3% y el 6% para las principales empresas que cotizan en el Ibex-35. Con el establecimiento de ese mínimo, se busca un sistema mucho más progresivo.

Además, este impuesto, en virtud de la descentralización autonómica, se paga en algunas comunidades y no en otras. Si el PSOE gobierna recuperaremos un sistema de tipo mínimo nacional, que las distintas comunidades pueden incrementar, como sucede en el IRPF. También se aplicará un tipo mínimo en el impuesto sobre sucesiones, que ahora varía por comunidades.

La recuperación de los valores de la socialdemocracia clásica de los años 80 mueve estas propuestas.

Lucha contra el fraude

La financiación de los proyectos económicos y sociales se realizará con la reforma fiscal citada y con el recurrente anuncio de lucha contra el fraude fiscal para lograr una mayor recaudación, pero sobretodo justicia social, puesto que son los asalariados los que soportan, en mayor medida, la carga tributaria.

El Gobierno oculta los datos del efecto de la reforma fiscal a Soria

Félix Lavilla, recuerda además, que se presentaron decenas de preguntas parlamentarias para recabar datos exactos de la reforma del PP en la provincia, en especial tras la información pública que había dado la Presidenta del PP y portavoz de Hacienda en el Senado, María del Mar Angulo; el Gobierno, incumpliendo el Reglamento del Congreso ha ocultado estos datos en la mayoría de las preguntas e informes solicitados, lo que demuestra que se hace un uso electoralista, sin poder contrastarse democráticamente como mandata el artículo 66 de la Constitución.