El PSOE de El Burgo de Osma muestra su preocupación por la falta de dinamismo en las Fiestas
Desde el PSOE de El Burgo de Osma queremos expresar nuestra más profunda preocupación y decepción ante el estancamiento y la falta de dinamismo y modernización en las fiestas de San Roque y la Virgen del Espino. Lo que deberían ser momentos de unión y celebración para todos los vecinos, se están convirtiendo en reflejos de la desconexión y desinterés del equipo de gobierno hacia nuestras vecinas y vecinos.
Las peñas, el corazón y alma de nuestras fiestas, se sienten desatendidas y subestimadas. No es solo una percepción, es una realidad palpable. Las reuniones con el Ayuntamiento son meras formalidades sin intención real de escuchar y actuar en consecuencia. La frustración es tal que están considerando no participar en los actos organizados por el consistorio. Este sentimiento de exclusión y menosprecio es inaceptable.
A pesar del aumento del abono de toros de 30€ a 54€ en un primer momento, llegando este año a los 63€, los vecinos han mantenido una actitud comprensiva, sin alzar la voz. Sin embargo, la paciencia tiene un límite. La feria se ha degradado al sustituir una corrida de toros por una novillada, lo que refleja una falta de consideración y respeto hacia los aficionados. En cuanto a la colaboración, es incomprensible cómo el Ayuntamiento ha obviado a la Federación de Peñas para el apoyo en la búsqueda de subvenciones que beneficiarían a ambas partes.
Esta falta de cooperación y visión compartida solo sirve para debilitar nuestras festividades y nuestra comunidad. La planificación de las fiestas se ha hecho un año más a espaldas del pueblo, sin consultar ni escuchar a aquellos que realmente viven y disfrutan de estos actos. Las decisiones arbitrarias y las excusas repetitivas son una constante que está agotando la paciencia de todos. Las peñas han dejado claro su hartazgo, e incluso se plantean no asistir a actos simbólicos de las Fiestas como medida de protesta.
La falta de un discomóvil en la plaza de las peñas, con la excusa de la limpieza, es solo un ejemplo de cómo el Ayuntamiento elude responsabilidades básicas. El programa festivo no ha evolucionado, permaneciendo estancado y desconectado de la realidad y expectativas de nuestros vecinos. No hay actos adecuados para los niños ni alternativas atractivas para los jóvenes, lo que evidencia una falta de visión y compromiso por parte del equipo de gobierno.
Las festividades, que deberían ser momentos de unión y celebración, se han convertido en un reflejo de la desconexión entre el Ayuntamiento y la comunidad. Además, nos preocupa enormemente la falta de eventos diseñados específicamente para niños y jóvenes en nuestro programa festivo. Esta omisión es un claro indicativo de una falta de visión y compromiso por parte del equipo de gobierno, desconectando a nuestras futuras generaciones de las tradiciones y la vida comunitaria que deberían heredar y enriquecer. Es esencial incorporar actividades que cautiven y eduquen a los más jóvenes, asegurando así la continuidad y el interés en nuestras festividades locales por parte de todas las edades. Lo más doloroso es sentir que al Ayuntamiento solo le importa el escaparate: una plaza mayor abarrotada el día del pregón, una plaza de toros llena y una bajada de toros vistosa. Esta actitud oportunista no puede seguir siendo la norma.
Las fiestas deben reflejar la diversidad y el espíritu comunitario, no solo ser un espectáculo para la galería. Desde el PSOE de El Burgo de Osma, hemos mantenido reuniones con partes activas en las Fiestas para entender la problemática a fondo. Consideramos que, si no actuamos para revitalizar nuestras fiestas, vamos a alejarnos de la juventud hasta un punto en que ya no les interesen nuestras celebraciones y estas no tengan una evolución positiva futura.
No podemos hacer unas fiestas al gusto de dirigentes anclados en el pasado; necesitamos una visión que incluya a toda la sociedad y se adapte a las nuevas generaciones. Creemos firmemente en la importancia de mantener nuestras tradiciones, pero es crucial revitalizarlas y asegurarnos de que todas las partes de la sociedad sean partícipes y se sientan integradas. Nuestras fiestas deben ser para todos. Estamos dispuestos a colaborar y aportar ideas para revitalizar nuestras fiestas y asegurarnos de que reflejen el espíritu y la vitalidad de nuestro pueblo. La comunidad merece unas festividades a la altura de sus expectativas, que fomenten el orgullo y la participación de todos sus habitantes